En los últimos años han aparecido diversos libros, dentro del cristianismo, con títulos como "El gran fraude" de Gerd Lüdemann, "El credo falsificado" y "Falsificaciones y engaños" de Karl-Heinz Deschner. Hoy os traduzco su pensamiento.
Ya Friederich Nietzsche se dio cuenta cuando dijo: "Yo condeno el cristianismo, yo formulo contra la Iglesia cristiana la más formidable acusación que jamás haya expresado acusador alguno. Ella es para mí la mayor de todas las corrupciones imaginables, [...] ella ha negado todos los valores, ha hecho de toda verdad una mentira, de toda rectitud de ánimo una vileza. [...] Yo digo que el cristianismo es la gran maldición, la gran corrupción interior, el gran instinto de venganza, para el que ningún medio es demasiado venenoso, secreto, subterráneo, bajo; la gran vergüenza eterna de la humanidad [...]". ¿Se pasa Nietzsche al decir esto? Karl-Heinz Deschner ha escrito la "Historia criminal del cristianismo" en 12 tomos y dice: "...no me consideraría refutado por haber omitido lo que también era verdadero, sino únicamente cuando alguien demostrase que he escrito algo falso". Escribir historia quiere decir destacar rasgos principales, generalización y cuantificación van necesariamente unidas. Cicerón dijo que "la ley principal de la historiografía es que nadie se atreva a escribir cosa alguna que sea falsa". Sin embargo la regla decimotercera de los jesuitas impone "que lo que yo tengo por blanco no es tal, sino negro, si lo manda la jerarquía eclesiástica" (Volk).
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