¿Qué es la Nueva Medicina Germánica?
La Nueva Medicina Germánica (en alemán Germanische Neue Medizin, GNM) se refiere a una pseudomedicina que establece el origen de las enfermedades exclusivamente en conflictos internos. Resolver estos conflictos sufriendo dolor, por ejemplo el causado por tumores, se propone como el único método apropiado de recuperación. Esta pseudomedicina afirma que, en caso de que el paciente evite enfrentarse a esos conflictos, él es responsable por su propia muerte. Según estos pseudoterapeutas, la medicina científica sería altamente dañina y destructiva para el proceso de curación.
¿Quién creó la Nueva Medicina Germánica?
La Nueva Medicina Germánica fue fundada por Ryke Geerd Hamer, un antiguo médico alemán conocido especialmente en los ambientes antisemitas. Después de la muerte de su hijo en 1978 y su propia enfermedad de cáncer, desarrolló sus ideas sobre el origen del cáncer y la enfermedad. Según su teoría, las enfermedades podrían ser causadas por conflictos no resueltos o experiencias traumáticas. Afirmó que su propia enfermedad fue causada por el impacto de la muerte de su hijo («síndrome de Dirk Hamer»).
En 1986 se le revocó su licencia médica, debido al daño causado a sus pacientes al ofrecerles tratamientos sin ningún tipo de base científica. A lo largo de los años siguientes fue detenido varias veces por ejercer la medicina de forma ilegal y por negación de asistencia en caso de enfermedades graves. Hasta la fecha tiene órdenes de detención en Alemania, Austria y Francia.
¿Funciona realmente?
Los practicantes de la Nueva Medicina Germánica afirman que hay muchos casos de sanación, sin embargo, la realidad es que no hay ningún caso documentado que muestre que un sufrimiento elevado padecido durante el transcurso de una enfermedad haya curado a nadie. Por otro lado, se han documentado más de un centenar de fallecidos a causa de la Nueva Medicina Germánica .
Por otro lado, todos los conocimientos científicos acumulados contradicen el origen traumático de la enfermedad que propone la Nueva Medicina Germánica, siendo factores decisivos el estilo de vida del paciente, la genética, el uso de drogas , la degeneración producto de la edad, sustancias químicas diversas y otros muchos desencadenantes. Por otro lado no hay ningún estudio científico que relacione enfermedades como el cáncer con experiencias traumáticas, ni existe evidencia clínica para suponer tal existencia.
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