Auto-conocimiento, auto-responsabilidad y el culto a uno mismo son parte de la Demonolatría como lo es en la búsqueda del conocimiento y la práctica del culto al Demonio. No nos arrastramos como seres indignos que dependen de su ayuda para hacer algo. No nos controlan. Nos controlamos a nosotros mismos. Trabajamos con los Demonios y los honramos para descubrir nuestro verdadero potencial como seres imperfectos, pero divinos, unidos por un plano físico de la existencia. Al honrarlos y adorarlos, nos honramos y adoramos a nosotros mismos porque ellos son parte de nosotros como nosotros somos parte de ellos. Todas las cosas son divinas. No pasamos nuestro tiempo tratando de mirar a los ojos de nuestros dioses. En lugar de eso, trabajamos para mirar a través de los ojos de los dioses. Básicamente, todos somos la manifestación física de lo divino."
- S. Connolly
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